martes, 30 de septiembre de 2008

Una vez más, ADEPA defiende a los oligopolios mediáticos

No podía ser de otra forma. Como conclusión de su 46 asamblea anual, la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) acusó al gobierno nacional de prácticas violatorias de la libertad de prensa y salió en defensa de las agresiones que supuestamente habrían recibido Clarín, La Nación, Perfil, o Radio Continental, entre otros, y sus periodistas. Quién tenga interés en consultar el texto completo firmado por el presidente de esa entidad, Carlos Gamond, puede hacerlo en http://www.adepa.org.ar/.

El Observatorio de Medios de Argentina rechaza por tergiversadoras y falsas las acusaciones de ADEPA y señala que, como es habitual en esa organización y otras afines, sus dichos apuntan a insistir en una falacia que no es consecuencia de errores conceptuales sino de intereses corporativos concretos: confundir libertad de prensa con privilegios irrestrictos de empresas propietarios de medios.

Según el ordenamiento jurídico nacional e internacional, las libertades de prensa y de expresión no son patrimonio de las empresas periodísticas sino de todos los que habitamos en territorio argentino.

Aunque no acordemos en un todo con la política de medios del actual gobierno nacional -más allá de nuestros apoyo decidido a toda decisión que proponga derogar la actual Ley de Radiodifusión y el establecimiento de un marco jurídico democrático para el sector-, entendemos que esta ofensiva de ADEPA se inscribe en la estrategia de las corporaciones mediáticas, tendiente a conservar sus privilegios y mantener cautiva a nuestra sociedad de sus propios intereses, a través de prácticas periodísticas que desinforman, que ocultan hechos, actores y contextos y que, en muchos casos, mientan en forma precisa y contundente.

A diferencia de las proclamas corporativas y de ADEPA, este Observatorio de Medios trabaja en función de hacer efectivo el pleno derecho de las ciudadanos, de los ciudadanos y del conjunto de la sociedad en sí, a informar y estar informados, porque ese es el marco para una auténtica y legítima libertad de prensa.

Las investigaciones del Observatorio –cuyos informes pueden ser solicitados a través de elobservatoriodemediosdeargentina.blogspot.com, del correo elobservatoriodemedios@gmail.com y de http://www.pecyp.com.ar-/ intentan develar cuáles son los mecanismos utilizados por los medios de comunicación para tejer sus intencionalidades editoriales. En esas investigaciones se ha expresado y fundamentado que, en forma recurrente, algunos de los que en forma tan encendida defiende ADEPA, llegaron incluso a difundir construcciones periodísticas lesivas del orden constitucional.

El Observatorio de Medios de Argentina

domingo, 28 de septiembre de 2008

El caso de Antonini, la valijas, Clarín y La Nación

De cómo manipular el contexto informativo

Varios diarios sugirieron ayer que la declaración de Guido Antonini Wilson en Miami “opacó” el discurso que la presidenta Cristina Kirchner había dado unas horas antes ante la asamblea de la ONU. Sin embargo, los matutinos no analizaron ni explicaron a sus lectores por qué prefirieron privilegiar un tema sobre el otro. Es decir, no se preguntaron por su propio rol en “opacar” el discurso. En Clarín, Eduardo van der Kooy afirmó que “el tenebroso venezolano (en referencia a Antonini) se encargó de aguar otra vez la fiesta que Cristina presumía en Nueva York”. El diario editó ayer como título principal “Antonini habló en el juicio sobre otra valija con dólares”, y relegó a un título secundario el discurso presidencial. En La Nación, Jorge Rosales consideró que “la aparición de Antonini opaca, de algún modo, la presentación de la Presidenta en la Asamblea de las Naciones Unidas”. En su título principal, al igual que Clarín, La Nación editó “Antonini declaró que en otra valija llegaron US$ 4 millones” y sólo le cedió un recuadro de seis líneas en su tapa a las palabras de la Presidenta. ¿Quién “opacó” o “aguó la fiesta” entonces? ¿Antonini con su declaración o los medios que jerarquizaron a ésta por sobre el discurso de la Presidenta? En Página/12, Daniel Míguez señaló que en la comitiva oficial ignoraron la palabra de Antonini “no porque no tuvieran nada que decir, sino en un intento de minimizar algo que pueda opacar en términos de títulos periodísticos la performance de la Presidenta”. Página editó en su título principal el discurso ante la ONU.

Tomado de www.diariosobrediarios.com.ar

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Ultimos posicionamientos de medios frente al gobierno argentino


Como el periodismo está siempre lleno de matices y es un mercado muy dinámico es importante tomar los datos como una foto de estos días y no como una película, ya que todo puede cambiar de nuevo.


En primer lugar, se puede afirmar que el Grupo Clarín llegó a un “armisticio” con el Gobierno (el primero en anunciarlo fue el periodista Diego Schurman en Crítica). Desde entonces (al menos tres semanas), el matutino se refugió en la neutralidad informativa en sus títulos principales de tapa. También redujo de manera drástica las portadas negativas (en las últimas dos semanas no editó ninguna en ese registro).


En tanto, los directivos de La Nación mantuvieron en los últimos días reuniones con funcionarios de la Casa Rosada. Sin poder afirmar si una cosa está vinculada con otra, desde hace dos semanas el diario también redujo sus tapas negativas hacia el Gobierno y como contrapartida aumentó la cantidad de positivas. Hace dos semanas, por ejemplo, publicó cinco portadas favorables: un récord durante el gobierno de Cristina Kirchner.


Es importante destacar que se está hablando sólo de títulos principales, no del interior de las ediciones, o de espacios de opinión, en donde -tanto en Clarín como en La Nación- se pueden leer críticas al Gobierno.


Por último, la salida de Roberto García de Ámbito y el desembarco en la redacción de profesionales cercanos al nuevo dueño, Orlando Vignatti, también mostró un giro en la línea del diario. Hace dos semanas que no publica títulos principales negativos. Así, quedan posicionados en el sector crítico El Cronista (de Francisco De Narváez), el periódico Perfil y Crítica (con serias dificultades financieras).

martes, 9 de septiembre de 2008

Los abusos del Grupo Prisa: Libertad de expresión o impunidad


En estos días asistimos a una embestida de los grupos económicos que controlan gran parte de los medios de difusión en Argentina. No es nuevo. Algo similar ocurre en otros países de nuestra América Latina. Las corporaciones pretenden imponernos un discurso único funcional a sus intereses. Cuando desde el Estado se les pone algún límite hablan de censura y de atentados a la libertad de prensa.

Uno de los grupos empresariales que más ha crecido en los últimos años en todo el continente es el español Prisa. Ese grupo ahora quiere aparecer como víctima de persecución por parte del Estado venezolano porque no se aceptó un pedido que efectuó para violar la ley.

Pero, vamos por partes: ¿Qué es el grupo Prisa? ¿De dónde sale?

Lo que comenzó en 1958 con la Editorial Santillana tuvo entre enero y junio de 2008 ingresos de explotación por más de 2.000 millones de euros. Prisa edita el diario madrileño El País, los periódicos españoles Cinco Días (económico) y As (deportivo) junto a otros veinte diarios locales, la Cadena Ser, 40 Principales y, a través de Unión Radio, la mayor red de emisoras de lengua española en Estados Unidos, México, Colombia, Costa Rica, Panamá, Argentina y Chile.

Prisa controla más de 1.000 emisoras, entre propias y asociadas. En Argentina compró AM Radio Continental (se dice que por 12 millones de dólares), una de las más potentes de Buenos Aires, transmitiendo para una cadena de innumerables radios de todo el país, muchas de ellas sin licencias.

Prisa también tiene un inmenso control sobre el mercado de los libros en América Latina, a través de Alfaguara, Aguilar, Taurus y otras editoriales, además de Santillana que produce casi todos los textos escolares que utilizan los alumnos latinoamericanos.

Otros medios de importancia que pertenecen al grupo Prisa son: La Razón, el principal diario de Bolivia; El Nuevo Día, el segundo diario de Santa Cruz de la Sierra, y Extra. La red nacional de televisión ATB y en un portal de Internet.

La red de Radio Caracol de Colombia, además opera a través del Grupo Latino de Radiodifusión, en Bolivia, Panamá, Costa Rica, Estados Unidos y Francia y México.

Los planes radiofónicos de Prisa involucran una expansión o en toda América Latina... y en el mundo hispano de EEUU, a través de una nueva empresa llamada Unión Radio. Además controla el 50% de la compañía Mexicana Televisa.

Este monstruo de las telecomunicaciones se plantea dominar el mundo radial de habla hispana. Cabe preguntarse entonces quien es realmente el que está detrás de este Grupo.

En Argentina, con la operación de compra de Continental y FM HIT, Prisa se realiza con una gambeta: quien compra es la sociedad de la española Carsa (un 30%) con GLR Services Inc (70%) con sede en Delaware, Estados Unidos.

Así aprovecharon el Tratado de Reciprocidad de Inversiones con EE.UU. de la época de Carlos Menem por el cual el capital norteamericano tiene el mismo tratamiento que el local. El grupo tiene 16 licencias en el país y es retransmitida ilegalmente por muchas emisoras en todo el territorio nacional.

¿Y ahora que pretende Prisa?

El grupo Prisa compró una de las radios más potentes de Argentina, AM 590 y a partir de esa emisora monta una cadena de repetidoras en todo el país. Tiene también FM Hit (Las 40 Principales) en Buenos Aires y otras 16 licencias en las principales ciudades del país.

En marzo de este año presentó ante el Comfer (Comité Federal de Radiodifusión) un pedido de autorización para retransmitir los contenidos de AM 590 en FM Nostalgie, en la frecuencia 104.3.

Ese pedido lo formuló cuando en realidad ya estaba transmitiendo en cadena y había firmado un acuerdo para pagar 30% de la publicidad por distribuir su programación por esa frecuencia.

Cómo si esto fuera poco, la frecuencia 104,3 Mhz había sido asignada a una sociedad constituida por el grupo Cuatro Cabezas (Pergolini) como resultado de un concurso en que también se presentó Prisa.

Los ganadores del concurso en su oferta se comprometían a emitir una programación cultural. Sin embargo hacen un convenio delegando la explotación.

Cabe agregar que Continental tiene también una licencia en FM, en 105.5 Mhz y no se ha propuesto usarla para los fines que dicen ser tan importantes para el grupo. Lo que hacen es colgarle la programación de Continental a otra FM (104.3) para optimizar la venta de publicidad.

¿Persecución o atentado a libertad de prensa?

El Comfer tramitó el pedido realizado por FM Nostalgie y Continental. El resultado fue negar el permiso solicitado, por evidente violación de la ley vigente, que prohíbe la transferencia sin previa autorización y la tenencia de más de dos emisoras en la misma zona, el cambio de programación y la delegación de explotación.

Además, el argumento es que el Estado debe asegurar la pluralidad y que no es aceptable que los mismos contenidos sean difundidos por varias emisoras en una misma zona de cobertura. Sobran razones.

Radio Continental, sus periodistas estrellas y atrás de ellos los defensores de la libre empresa salieron rápidamente a denunciar censura. No faltó el coro imperial de "Periodistas sin fronteras".

Según ellos la respuesta del Comfer al pedido de Continental es una venganza por la postura de esa emisora a favor de los patrones del campo en el reciente conflicto por las retenciones móviles a la exportación de granos.


Aparecen como victimas cuando en realidad se encontraron con un límite a la impunidad con la que acostumbran a actuar.

Tomado de Radio Mundial de Venezuela (www.radiomundial.com.ve). 6/9/08